Marcos sin retratos

“Muchos de los textos impresionan por su concision, por su habilidad de darle un vuelco a la trama mediante un descubrimiento final o mediante una sustitución o transformación de los personajes, abriendo así nuevas y sorprendentes perspectivas.”

Carmen Dolores Hernández, El Nuevo Día

“(…) una voz de indudable interés en la nueva narrativa boricua.”

Alexis Aquino, El Vocero

Con una prosa transparente y sencilla, Hugo Ríos-Cordero logra en Marcos sin retratos presentar un lado siniestro de la realidad. Esta colección de 30 relatos, en la cual se pueden sentir los ecos de Poe y de Cortázar, explora el detalle de lo cotidiano desde un punto de vista que podría llamarse “gótico urbano”. Las narraciones del joven escritor permiten que la fatalidad se cierna sobre el texto con un abuso exacto y necesario de la narración en primera persona. Muchos de estos breves cuentos postergan la revelación hasta el último instante para así sorprender al lector el cual participa de este modo de la misma suerte que los personajes. Con este libro se anuncia una voz significativa en la nueva narrativa puertorriqueña.

Hugo Ríos-Cordero nació en Mayagüez, Puerto Rico, en octubre de 1972. Ingresa al Recinto Universitario de Mayagüez de la UPR en 1990 a estudiar Economía, aunque después se traslada a Literatura Comparada. Allí escribe su tesina sobre “El híbrido” basándose en una novela de Salman Rushdie. Se gradúa en 1997 e ingresa a la Maestría en el Departamento de Inglés. En el 2003 terminó su tesis sobre “La influencia del gótico en el realismo mágico”. En Marcos sin retratos se encuentran “En el nombre del padre” (Premio Certamen de Cuento de El Nuevo Día, 2002) y “Vestida de blanco” (Primer Premio Juegos Florales de San Germán, 2000). Su poemario Rostros de cera obtuvo mención honorífica en el certamen de poesía del El Nuevo Día, 2002. En estos momentos trabaja en su primera novela, Vendaval. Ha publicado cuentos y poemas en la Revista Atenea. Su biblioteca y filmoteca son sus grandes pasiones artísticas. Vive en Mayagüez con su esposa Magda Morales y su hijo Hugo Gabriel.