En este libro, Otho Rosa nos invita a darle una sexta vuelta a Jericó con un excelente tratado sobre la “inteligencia de la fe”, que es la teología. Ver lo invisible no se conforma con razonamientos bíblico-teológicos precisos, detallados y abarcadores. Pone como cómplices e interlocutores de su ruta a la música, la pintura, el recuerdo, la poesía y hasta la propia iconografía cristiana, por si acaso se encuentra en el camino a algún interlocutor más circunspecto. Desde esa ruta/diálogo, el autor, como “escriba docto en el reino de los cielos” nos invita a desentrañar “de su tesoro, cosas nuevas y cosas viejas” en una suerte de hallazgos en los cuales el propio lector o lectora disfrutará la ingeniosa confusión de identidades entre lo añejo y lo novel del replanteo de la fe desde coordenadas menos evidentes y más vinculantes a la compleja experiencia humana. Ya lo decía Antoine de Saint Exupéry: “lo esencial es invisible a los ojos”. Invitamos al lector o lectora a acompañar a Otho en este viaje íntimo, a esta caminata de Emaús en la cual nos descubriremos todos y todas, como iglesia, como familia y como nación, compartiendo el pan del amor, de la fe y de la esperanza, que nunca desmerecen con el pasar del tiempo. Quizás, antes de lo previsto, ya estemos comenzando la séptima vuelta. ¡Enhorabuena, Otho!
Rvdo. Angel L. Rivera Agosto
Secretario Ejecutivo
Concilio de Iglesias de Puerto Rico
CONTENIDO
Prólogo
Nota preliminar
Ver lo invisible
Los Símbolos
Los Vitrales
Los Cuadros
Boceto de un poeta
Viaje y pasión a la Ciudad Santa
Otra Epifanía: ángeles, pastores y magos
La misteriosa forma del tiempo
Genealogía de la fe
Notas del autor
Apéndices
Otho Rosa Vélez estudió filosofía en la Uiniversidad de Puerto Rico en Río Piedras. Escribe –menos de lo que debería– por razón de lo que parece ser... una vocación –una manía, un vicio– familiar. Escucha voces de todos los registros que le hablan de temas infinitos y ve cosas –a simple vista– invisibles. Sus otros libros son: Refugio Permanente (1984), Cuaderno (1988), Crónica de un desobediente (Isla Negra, 2000, Mención del PEN Club de Puerto Rico); y es parte de la antología Escribir lo Divino ( Isla Negra, 2010). Es co-editor del periódico cibernético La Vieja Noche (www.laviejanoche.com)