STASIS
Del sagrado río, río silba el viento
el nuncio que a la montaña interpela en su sitial
los pájaros andantes bienvienen y preguntan
los puntales de tu música:
¿Quién, volcán, es tu amante?
¿Por quién mueres?
Norte torbellino imantado rezago
presuroso mensaje
la horda combatiente en su vértice lugar vidente
mares luz de salvación.
¿Es alba lo que blande la espada
en ampo camino de urgencia?
¿Qué montañas esconde el cuerpo garante?
Capaz en su vórtice de crear otro tiempo propio, Piélago, de Javier Roig, signa de una vez por todas el fin del vicio logocéntrico de la mal llamada “Poesía Calle” y marca el retorno definitivo de una poesía textual heterográfica. Con este poemario, Roig enfila su palabra hacia un cerebralismo conceptual, cuyo imaginismo gesta una poiesis deconstructiva. El yo poético nombra la fragmentación del cosmos para luego reordenarla en esa “Activa pura forma”, a la que elude en el poema “Victoria”. Con su particular tono reflexivo y surrealizante, la poesía de Roig, rica en alusiones culturales, intenta rescatar la inmaterialidad de lo material y la incorporeidad del lenguaje para así comunicarle efectivamente al/la lector/a “La transformante operación de la palabra”.
–Alberto Martínez-Márquez, Universidad de Puerto Rico en Aguadilla
Escrito en fina teoría, Piélago dicta, desde los confines de la Odisea de Homero, la génesis distante del amor homoerótico. Análogo al piélago que interpela al mirador y al mirador que teje la palabra, Piélago celebra la sabiduría creacionista. Junto a dos escritores contemporáneos, Hugo Mujica y Adonis, glosa su afirmación al poder humano sobre la obra universal del hombre: Piélago enfrenta al canon literario en su afirmación a la intrínseca naturaleza del pensamiento lírico amoroso y arguye, cual Dante en el jardín de Borges, sobre el objeto del amor humano. Desde el océano las musas nieblas conforman enigmas sí resueltos en la irresoluble e irremediable integridad del número y la naturaleza, del hombre y el universo.
Javier Roig nació en San Juan de Puerto Rico. Cursó estudios de literatura francesa y comparada en las universidades de Puerto Rico, París y Michigan, donde obtiene una maestría en Artes. Reside entre Nueva York y San Juan, y ejerce la enseñanza, la escritura y la traducción. Es autor del poemario Islas ideograma (2005).